En la última etapa del ser humano el tiempo pasa mas lento, dando tregua para atender los pequeños detalles, nos permite regodearnos de cada situación vivida. ¿Por qué no intentamos vislumbrar la belleza de este momento? ¿Por qué no parar y dedicar nuestro tiempo a nuestros mayores? No olvidemos que nuestros mayores son los que nos traspasan el conocimiento, los valores, nos ayudan a centrarnos en lo importante.
Serrat: “Este mundo que nos tocó vivir esta rodeado de misterios indescifrables, una tremenda insensatez es el trato que se les da a los viejos, nosotros después de sacarles todo el jugo acostumbramos a arrinconarlos y a abandonarlos, esto es una demostración palpable de la estupidez de esta sociedad”.