Voy a escribir mi carta, quizá esta Navidad sea distinta.
Estoy solo, todo a mi alrededor a desaparecido, mi juentud, mi famili, mi vida donde está mi vida, llena de ilusiones y decepciones pero era mia. Ahora estoy aquí, en una casa que no es la mia con la compañia de otras personas en mi misma situación, que nos ha pasado? solo somos viejos.
Nadie me abraza, ni siquiera una sonrisa, quiero ver a los niños jugar, quiero que me llenen de su alegria, quiero verles la cara cuando colocan el árbol o abren sus regalos, quiero sentirles felices por que me da la felicidad.
Qué daño he hecho para que la vida me recompense con soledad.
Solo, solo miró el nacimiento que han puesto aquí y me acuerdo cuando era niño y lo ponía con mi madre, como disfrutabamos y nos reiamos. Ahora solo mis ojos se llenan de lágrimas, que te cuesta regalarme una sonrisa,un beso, un abrazo, coger mi mano y apretarla mientras nos miramos con cariño, deben ser egalos muy caros para un pobre viejo.
Solo me quiere la muerte, solo esperando que por lo menos ella me lleve de la mano y no me deje ir. Que la vida amigo te devuelva lo que has dado.
Nuestros mayores necesitan nuestro cariño, como cualquier persona. Muchos están solos durante el año, y las Navidades para ellos se vuelven especialmente dolorosas. ¿Por qué no ayudarles con un sencillo gesto?: Pasad algo de tiempo con ellos. Eso, tan simple, les devuelve la ilusión.